en el alto verdecer del
ensueño
donde la palabra se
obtura,
acontece
eso inefable
que tampoco es silencio
los museos pierden sus obras
las espirales del tiempo traman los puentes de cristal
las fuerzas desgarradoras se invierten
la maravilla va de
mano en mano en busca de su sinfín
hilándonos el día a
día
liándonos
un trazo de
lucificción escribe la letra
eclipsa
una obstinación se vuelve
todo poderosa
el brío humano en
primavera
se pierde la cordura,
se brota,
se florece,
se fructifica,
se desgrana,
gotas
de aguamiel
una
a
una
.
.
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario